Albert Einstein (1879-1955) decía en una de sus frases más repetidas que ‘Todos
los hombres tienen la obligación de devolver al mundo como mínimo el equivalente
de lo que se llevan de él’. Este año que ha terminado ha conllevado importantes
avances en el ámbito del impacto y la gestión de las empresas en el terreno de los
derechos humanos sin embargo, y parece que todos estamos de acuerdo en ello,
aún queda camino por recorrer. Curiosamente, estos últimos meses del año 2006,
se ha revelado como un tema de especial actualidad en este ámbito (no sólo por la
responsabilidad que tienen los gobiernos al respecto sino también porque es un
tema de difícil solución sin la connivencia del sector empresarial) la cuestión del
cambio climático con el que muchos nos habíamos resignado a ‘convivir’. Las
últimas predicciones de los expertos auguran tiempos difíciles de recesión
económica en los países desarrollados (alrededor del 20%) y de hambrunas,
muerte y miseria en los países ya de por sí empobrecidos. Hace ya unos años esta
cuestión suscitó la idea de que, efectivamente, vivimos en un mundo
interconectado, pero la magnitud de los análisis y estudios internacionales que han
cerrado el pasado año 2006 revelan que nos hallamos ante una cuestión que apela
de manera urgente a nuestro compromiso, responsabilidad y creatividad personal y
empresarial. Es por ello que a lo largo de estos últimos meses hemos querido
ofrecer en este boletín algunas referencias y herramientas útiles a las empresas
para hacer frente a este inminente desafío que puede poner definitivamente a
prueba nuestra política de responsabilidad social en el medio y largo plazo así
como el propio modelo de empresa al que estamos acostumbrados. Porque lo que
ahora se ha hecho evidente es que quizás nos quede poco tiempo y, como instaba
recientemente el antiguo Secretario General de Naciones Unidas, K. Annan,
nuestro modelo de empresa debe adaptarse a una situación que no es nueva pero
que sí es necesario gestionar con la máxima responsabilidad y eficacia desde sus
distintas áreas de responsabilidad. Y éste es un tema de especial relevancia para
la correcta gestión de los derechos humanos en la empresa debido a que el
impacto, positivo y/o negativo, del sector privado en nuestro medio genera
ineludiblemente impactos en otros derechos como, por ejemplo, el derecho a la
salud, a la alimentación y al simple desarrollo (humano y sostenible) de nuestras
comunidades, locales y globales. La puesta al día en la gestión de esta cuestión
será pues crucial en los próximos años para validar interna y externamente nuestra
política de responsabilidad social y de derechos humanos. No olvidemos por
último, las palabras de algunos ‘sabios’ como Séneca (4 a.C – 65) que decía ya
hace muchos siglos, ‘Si vives al dictado de la naturaleza, nunca serás pobre; si lo
haces siguiendo las ideas de la humanidad, nunca serás rico’.
María Prandi, Responsable del Programa ‘Empresa y derechos humanos’
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